la que les contaré es la típica historia que sale en la sobremesa de la cena navideña:
había una vez dos pequeñines -mi prima y hermano- que no pudieron aguantar hasta las doce del 25 -¿o 24?- y miraron los regalitos que el viejo pascuero escondió en el clóset de mis papás. me hicieron enterar de que el maravilloso objeto que gozaría de ser mi regalo era un celular -yupi- yo de la emoción no encontré nada más inteligente que preguntarle a mi papá si en serio me iban a regalar un celular y... y... LAS CAGUÉ PO HERMANOH. llegaron los pacos porque mi papá estaba descontrolado! okno, pero retaron a los cabros y a mi me pusieron "la judas" -léase yudas como lo canta lady gaga- y eso po.
este año el viejito se portó bien... ¿a quién engaño? el viejo pascuero no existe. mis tíos me regalaron un par de aritos, una polerita y una agenda 2013 -porque al final el mundo no se acabó- mis papás se pusieron con el reloj y el cd de keane. en resumen, no tengo de qué quejarme :) ... no les voy a decir todo eso de que lo importante es la familia blablabla porque la verdad eso ya todos lo saben y hay que admitir que los regalos son una de las partes más bacanes de la celebración djghdgh perdón.
me disculpo por publicar el post navideño el 26, osea, no me disculpen, porque este es mi blog, y por ser mío debe ser igual de impuntual jojo así que retiro mis disculpas. se viene la despedida del 2012, las futuras metas del 2013 y el wishlist cumpleañero así que hay escarabajo para rato -click-
Como que no existe! ¬¬ jaja
ResponderEliminarPta yo tampoco he encontrado un escarabajo viviendo en un peep toe xD
ResponderEliminarQué graciosa la anécdota de Navidad, me imagino que no habrá almuerzo en este mundo en que te puedas salvar de que la cuenten, jajaja!
Saludos :)